¿Estás tomando decisiones digitales con base en datos o con base en intuiciones?
 Si tu respuesta se inclina a lo segundo, es momento de hablar de benchmarking digital: compararse ya no es una opción es una ventaja competitiva clave en los negocios. En el siguiente artículo te cuento qué es, tipos, el proceso para aplicarlo y algunas herramientas útiles para llevarlo a la práctica y que forme parte de tu estrategia global.

¿Qué es el benchmarking digital?

El benchmarking es una herramienta de análisis estratégico que permite comparar tus métricas, procesos y resultados con los de referentes del mercado, sean competidores directos o líderes de otros sectores. Su objetivo no es copiar, sino entender tu posición actual en el mercado y descubrir oportunidades tangibles de mejora.

Benchmarking en acción: el caso de la conversión

Imagina que gestionas un e-commerce con una tasa de conversión del 1%. Al comparar con la media del mercado (1,22%), detectas que hay espacio para optimizar. Aquí es donde el benchmarking se transforma en una herramienta táctica: analizas tu funnel, identificas cuellos de botella y aplicas mejoras estratégicas. Resultado: decisiones con criterio y retorno.

¿Por qué es imprescindible el benchmarking en negocios digitales?

Vivimos en un entorno de cambios constantes. Lo que funcionaba hace seis meses hoy puede estar obsoleto. Según el Informe de Tendencias en B2B Commerce 2024 de Adobe, los negocios que iteran sobre sus procesos digitales y adaptan sus plataformas crecen hasta un 261% en volumen de pedidos. Benchmarkear te da esa perspectiva externa que necesitas para no quedarte atrás.

Aplicaciones prácticas:

  • Validar decisiones estratégicas con métricas comparables.
  • Identificar brechas competitivas.
  • Justificar inversiones ante dirección o inversores.
  • Detectar prácticas que generan ventajas reales.

Tipos de benchmarking digital

Existen una clasificación de benchmarking digital que debes reconocer:

  1. Interno: compara áreas dentro de tu misma empresa. Ideal para alinear procesos en fases de crecimiento.
  2. Competitivo: observa qué hacen mejor tus competidores directos. Útil para identificar diferenciales y puntos débiles.
  3. Funcional: toma inspiración de otros sectores. Muchas veces, la innovación está fuera de tu industria.

El proceso de benchmarking en 5 pasos

Vamos a desglosar cinco pasos esenciales que te ayudarán a llevar a cabo un benchmarking efectivo.

1. Planificación: ¿Qué vas a medir y por qué?

Antes de lanzarte a recopilar datos, el primer paso es definir qué quieres mejorar. Si no sabes por qué estás midiendo algo, lo más probable es que no consigas un resultado claro. Este es el momento de identificar las métricas clave de tu negocio. Tal vez quieras saber si tu tasa de conversión está a la par con la del sector, o si tu embudo de ventas necesita más optimización. Sea lo que sea, es crucial que tus objetivos sean concretos y medibles.

2. Recopilación de datos: Fuentes internas y externas

Con los objetivos claros, es hora de recolectar los datos. El benchmarking no solo se trata de ver lo que tú estás haciendo; también necesitas conocer lo que otros están haciendo bien. Aquí es donde entra la recopilación de datos, tanto internos como externos.

3. Análisis: ¿Dónde están las brechas y las oportunidades?

Ahora que tienes los datos, es momento de analizar. Compara tus métricas con las del mercado y detecta las brechas. Tal vez tu tasa de conversión sea del 1% y la media del sector esté en el 1.22%. ¿Por qué la diferencia? Aquí es donde deberás analizar cada parte de tu embudo de ventas: la experiencia de usuario, el proceso de pago, las campañas de publicidad… Todo cuenta.

Puedes leer ahora nuestro artículo: Cómo mejorar la experiencia de cliente, te damos unos ejemplos de cómo se puede fidelizar a un usuario con distintas tácticas.

4. Implementación: ¡Es hora de poner manos a la obra!

Con los resultados del análisis, ya tienes claro qué áreas necesitas mejorar. Ahora toca tomar acción. Pero ojo, no se trata de implementar «cambios a lo crazy«. Primero haz pruebas A/B para validar lo que realmente va a funcionar. Experimenta con pequeñas modificaciones en tu página web, en las llamadas a la acción, en la estructura de tus campañas. Una vez que encuentres lo que da resultados, aplica las mejoras de manera más amplia.

5. Seguimiento: Mide, ajusta y sigue evolucionando

Aquí es donde muchos cometen el error de detenerse. El benchmarking no es una actividad puntual, sino un proceso continuo. Debes monitorear constantemente cómo los cambios implementados están afectando tus métricas. Si algo no está funcionando, es hora de ajustar y repetir el ciclo.

PasoDescripciónHerramientas Consejos Clave
1. PlanificaciónDefine qué métricas o procesos comparar, estableciendo metas claras.Google Analytics 4 (GA4), SEMrush, Ahrefs, Kissmetrics, SistrixFija objetivos claros y medibles. Escoge las áreas que más impacto tienen en el crecimiento de tu negocio.
2. Recopilación de DatosReúne datos internos y externos de tu negocio y de fuentes de la industria. Utiliza informes sectoriales y herramientas de análisis.GA4, IAB Spain, Flat101, Ahrefs, SEMrushUtiliza datos propios y compara con informes del mercado. Accede a fuentes externas como IAB Spain y Flat101 para obtener información relevante.
3. AnálisisIdentifica brechas, tendencias y prioridades. Compara tu rendimiento con el de la competencia.Excel, Tableau, Power BI, Google Data StudioBusca brechas entre tu rendimiento y el de la competencia. Identifica las áreas que más necesitan mejora.
4. ImplementaciónAplica los cambios y mejoras necesarias según los resultados obtenidos. Testea y ajusta según lo que funcione mejor.Optimizely, Unbounce, Hotjar, A/B testing, Google OptimizeRealiza pruebas A/B para validar nuevas estrategias. Comienza con las áreas de mayor impacto y ajusta según los resultados.
5. SeguimientoMide el impacto de los cambios, ajusta y repite el proceso para seguir mejorando continuamente.Google Data Studio, Looker, Mixpanel, Power BIMonitorea constantemente con dashboards de rendimiento. Itera continuamente y ajusta según los resultados obtenidos para mantener una ventaja competitiva.

Cuándo aplicar benchmarking en tu empresa

Sabes que es momento de hacer benchmarking cuando:

  • Estás lanzando una nueva estrategia y necesitas validar tu enfoque.
  • Tus métricas están planas y no entiendes por qué.
  • Te faltan datos claros para decidir, pero te sobran dudas.
  • Quieres invertir con criterio y necesitas respaldo cuantitativo.
  • Si percibes pérdida de cuota de mercado.
  • Antes de realizar una inversión relevante en tech, marketing o UX.

Benchmarking + Acción = Ventaja competitiva

En Disruptivos trabajamos con empresas que quieren evolucionar de decisiones por “feeling” a decisiones por “datos demostrables”. Nuestro servicio de Consultoría de negocio digital te permite ver tus números en contexto, compararlos con benchmarks de mercado y definir mejoras accionables.

El benchmarking es una metodología de trabajo esencial. Y en el mundo digital actual, saber dónde estás parado es el mínimo para decidir hacia dónde moverte. Si no sabes dónde estás tú y tus competidores es como estar ciego. Tarde o temprano te darás el porrazo.

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Esteban
HEAD OF BRAND | Estratega de contenidos y comunicación | Formado en Marketing Digital Avanzado, Social Media e Inteligencia Artificial Generativa.